Este artículo originalmente apareció en mi libro Creativo: 100 consejos para vivir de tu arte.
Una manera de sistematizar la creación de hábitos para alcanzar con ellos objetivos a largo plazo es mediante la elaboración de rutinas.
Las rutinas son tareas que se ejecutan en un momento del día para generar la creación de un hábito que, con el tiempo, cumpla un objetivo mayor a largo plazo.
Tener una buena rutina te puede evitar muchos problemas, ya que te dice qué es lo que debes de hacer para alcanzar tus objetivos cada día y te ahorra la fuerza de voluntad que te cuesta decidir lo que vas a hacer.
Una rutina simplifica tu vida, ya que evita que tomes decisiones innecesarias y te ayuda a que te enfoques en tus objetivos principales.
Por esta razón, las grandes mentes de la humanidad, desde científicos hasta CEOs, tienen rutinas que repiten todos los días para enfocar sus reservas de voluntad en cumplir los objetivos que se plantean y pasar por lo tedioso de manera automática.
La rigidez de un formato te obliga a enfocarte en trabajar en lo que te importa, y vuelve rutinarias las acciones tediosas que debes realizar para alcanzar tus metas.
